domingo, marzo 16

Sostenibilidad y emprendimiento en Honduras: la visión de Ficohsa a 16 años de su programa

Conscientes de su impacto social y ambiental, las empresas han trascendido su rol tradicional y se proponen como agentes de cambio que pueden contribuir significativamente al desarrollo de las comunidades donde operan. Este nuevo paradigma empresarial ha dado lugar a una creciente inversión en iniciativas que buscan mejorar la calidad de vida de las personas, proteger el medio ambiente y fortalecer el tejido social.

Una de las áreas en las que este compromiso ha cobrado mayor relevancia es en el ámbito agrícola. La producción alimentaria representa un pilar esencial para cualquier comunidad, y las empresas están reconociendo que respaldar a los pequeños productores no solo constituye una acción socialmente responsable, sino que también se traduce en una estrategia comercial astuta. Al destinar recursos a programas agrícolas, las empresas aseguran el acceso a productos frescos y de alta calidad, optimizan sus cadenas de suministro y establecen una conexión más genuina y significativa con los consumidores. En este contexto, el programa «De Mi Tierra» se presenta como un ejemplo emblemático de cómo las inversiones del sector empresarial pueden transformar la vida en las comunidades rurales.

De Mi Tierra y Ficohsa, un pacto por el desarrollo sostenible

El sector agrícola en Honduras ha tenido un notable crecimiento gracias a iniciativas como «De Mi Tierra», un programa que ha cambiado la vida de miles de productores en el ámbito rural. Impulsado por el Banco Ficohsa y con el respaldo de la Fundación para el Desarrollo Empresarial Rural (Funder), este proyecto ha probado ser un verdadero motor de progreso económico y social en el país. Al proporcionar financiamiento, formación y un mercado garantizado, «De Mi Tierra» ha empoderado a los agricultores hondureños y ha consolidado la producción local de alimentos.

El Banco Ficohsa se ha establecido como un protagonista fundamental en la promoción del desarrollo sostenible en Honduras. Mediante iniciativas como «De Mi Tierra», esta entidad financiera evidencia su compromiso con la inclusión financiera y el respaldo a las comunidades rurales. Al ofrecer acceso a créditos y servicios financieros a pequeños productores, Ficohsa ayuda a consolidar la economía local y a elevar la calidad de vida de miles de familias hondureñas. Este enfoque se encuentra en consonancia con los principios de responsabilidad social empresarial, demostrando que es factible crear valor económico y social al mismo tiempo.

De Mi Tierra: más que un programa, un movimiento que transforma las comunidades

«De Mi Tierra» ha ido más allá de ser un mero programa de financiamiento. Se ha consolidado como un movimiento que aspira a revolucionar el sector agrícola en Honduras. Al ofrecer capacitación técnica y acceso a mercados, esta iniciativa ha empoderado a los productores, habilitándolos para optimizar sus prácticas agrícolas y elevar su productividad. Además, al incentivar la producción de alimentos frescos y saludables, «De Mi Tierra» ayuda a asegurar la seguridad alimentaria del país y a disminuir la dependencia de las importaciones.

El impacto de «De Mi Tierra» va más allá de los productores que se benefician directamente. Genera empleo y aumenta los ingresos de las familias rurales, ayudando a disminuir la pobreza y a fortalecer el tejido social en las comunidades. Además, al fomentar prácticas agrícolas sostenibles, «De Mi Tierra» contribuye a la conservación de los recursos naturales y a la mitigación de los efectos del cambio climático. La experiencia de Yesenia Hernández, una productora de Azacualpa, ilustra claramente cómo este programa ha cambiado la vida de muchas personas. Gracias a la iniciativa de Ficohsa, Yesenia ha logrado ampliar su producción y mejorar su calidad de vida.

«De Mi Tierra» no solo ha ofrecido los recursos necesarios para que los agricultores incrementen su producción, sino que también ha cultivado una cultura de emprendimiento en las comunidades rurales. Mediante talleres y mentorías, el programa ha apoyado a los productores en el desarrollo de habilidades empresariales esenciales, tales como la planificación estratégica, la gestión financiera y la comercialización. Gracias a este impulso, muchos productores han logrado diversificar sus cultivos, crear nuevos productos y acceder a mercados más amplios, como es el caso del convenio con Supermercados La Colonia.

Es correcto afirmar que el respaldo al emprendimiento en el ámbito agrícola no solo repercute positivamente en los productores individuales, sino que también favorece la sostenibilidad del sector en su conjunto y refuerza la economía local.

16 años cultivando futuro: «De Mi Tierra», un modelo de cooperación para el desarrollo sostenible

El programa «De Mi Tierra», que este año marca su 16º aniversario, es una iniciativa destacada que ilustra el potencial de la colaboración entre el sector público, privado y la sociedad civil, así como el impacto que puede tener la inversión empresarial en la transformación de las comunidades rurales. Al ofrecer acceso a financiamiento, formación y mercados, esta iniciativa ha facultado a miles de agricultores, produciendo un efecto positivo en sus economías locales y aportando a la seguridad alimentaria del país.

Este hito fue precisamente resaltado por el Banco Ficohsa durante la presentación de sus memorias de sostenibilidad 2023, como un claro ejemplo de su compromiso con la sostenibilidad y la transparencia. Al compartir los resultados e impactos de «De Mi Tierra» de forma abierta y minuciosa, Ficohsa evidencia su alineación con los principios de buena gobernanza corporativa y reafirma su papel como un actor central en el desarrollo sostenible de Honduras.

Para obtener más información sobre los programas de desarrollo implementados por Grupo Ficohsa, te invitamos a explorar su sitio web y descubrir cómo el grupo promueve el desarrollo sostenible en la región.